Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), podemos definir a la
familia como el “conjunto de personas que conviven bajo el
mismo techo, organizadas en roles fijos (padre, madre, hermanos, etc.) con
vínculos consanguíneos o no, con un modo de existencia económico y social
comunes, con sentimientos afectivos que los unen y aglutinan”.
¿Cuál es la función de la familia?
De acuerdo con Allard, las funciones de una familia están relacionadas con
cubrir una serie de necesidades básicas: Necesidad de tener
(refiriéndose a lo material, son los aspectos económicos y educativos
necesarios para vivir), Necesidad de relación (la
familia enseña a socializarse, comunicarse con los demás, querer, sentirse
querido, etcétera) y Necesidad de ser (la
familia debe proporcionar al individuo un sentido de identidad y autonomía de
unos mismo)
Una de las funciones que más peso tiene, de acuerdo con la literatura, es
la vertiente socializadora de la familia. Gracias a este proceso, las personas
adquirimos los valores y las conductas o normas que son más aceptables en la
sociedad en que vivimos. En definitiva, la familia nos prepara para vivir en
sociedad desde el ambiente de seguridad que nos proporciona; es el primer
entorno al que los niños acceden para relacionarse y aprender, motivo por el
cual es fundamental que la familia pueda cubrir esta necesidad básica para que
tengan buen ajuste psicosocial en la adultez.
Tipos de familia actualmente
1. Familia sin hijos
Este tipo de familia está formada por una pareja sin descendientes. Cada
vez son más las parejas que deciden conscientemente no tener hijos por
múltiples razones personales. En otros casos, la infertilidad de uno o ambos
miembros no se puede solucionar médicamente, motivo por el cual algunas parejas
no tienen hijos.
El hecho de tener hijos no es sinónimo de ser familia, las parejas sin hijos también son familias.
2. Familia biparental con hijos
La familia biparental con
hijos es la más clásica, también conocida como nuclear o tradicional. Está
formada por un padre, una madre y el/los hijo/s biológico/s. La mayoría de la
población, al pensar en una familia, se imagina a la familia biparental con
hijos. Aunque cada vez se esté ampliando más el término, culturalmente aún
podemos decir que es el tipo de familia más popular.
3. Familia homoparental
Las familias homoparentales son
aquellas que están formadas por una pareja homosexual (de dos hombres o dos
mujeres) con uno o más hijos. Aunque no es una familia nueva, su presencia en
la sociedad ha aumentado significativamente en los últimos años.
Este tipo de familias han tenido que luchar contra los prejuicios derivados
de la homofobia: mientras poco o nada se cuestiona la validez y capacidad de
una pareja heterosexual para formar una familia, las parejas homosexuales con
hijos parece que hayan tenido que recurrir incluso a investigaciones
científicas que prueban su legitimidad como familia. Afortunadamente, conforme
la sociedad avanza, también lo hace la aceptación de las familias
homoparentales.
4. Familia reconstituida o compuesta
Esta clase de familia probablemente es la más frecuente en la actualidad
debido a la creciente tendencia a la separación y al divorcio.
Como se deduce de esta introducción, las familias reconstituidas o
compuestas son las que están formadas por la fusión de
varias familias biparentales: tras un divorcio, los hijos viven con su madre o
su padre y con su respectiva nueva pareja, que puede tener también sus propios
hijos a cargo. Además, el otro progenitor también puede tener una pareja con
hijos, por lo que estos hijos formarán parte de una gran familia compuesta.
5. Familia monoparental
Este tipo de familia, de igual forma que ocurre con la homoparental, no
está exenta de crítica y prejuicios, tanto en el caso de mujeres como de
hombres, aunque estos últimos sean aún una minoría.
Las familias monoparentales están
formadas por un único adulto con hijos. Generalmente, son más frecuentes las
llamadas familias “monomarentales”, en las que el adulto presente es la madre.
A pesar de que existe mucha gente que cree que las familias monoparentales
están incompletas, no es cierto que ese progenitor único necesite forzosamente
la ayuda de otro adulto para tirar adelante. Cada vez son más las familias
monoparentales que están surgiendo en nuestro país. De hecho, en 2017 ya
representaban un 10% del total de hogares, como lo demuestran los datos de la
Encuesta Continua de Hogares que presenta anualmente el Instituto Nacional de
Estadística (INE).
6. Familia de acogida
Las familias de acogida constan
de una pareja o un único adulto que acoge a uno o más niños de manera temporal
mientras que no puedan vivir en su familia de origen o mientras no encuentren
un hogar permanente.
Son familias temporales que se
encargan de ofrecer a menores en situación de necesidad el mejor entorno
posible hasta que sean adoptados definitivamente o hasta que su familia
biológica pueda ocuparse de ellos. El acogimiento puede ser de urgencia, de
corta duración (hasta 2 años), de larga duración (más de 2 años) o de fines de
semana y vacaciones escolares.
7. Familia adoptiva
Las familias adoptivas constan
de una pareja (o un adulto en solitario) con uno o más hijos adoptados. Pese a
no tener vínculos de sangre, son igualmente familias que pueden desempeñar un
rol parental igual de válido que las familias biológicas.
Muchas familias, por problemas de fertilidad, optan por adoptar como forma
de acceder a la parentalidad. Otras familias, por convicción personal,
prefieren adoptar que concebir. Sin embargo, es frecuente que las familias
adoptivas se concentren en los países desarrollados, dado que sus ciudadanos
tienen más recursos económicos para poder adoptar.
8. Familia extensa
La familia extensa está
formada por varios miembros de la misma familia que conviven bajo el mismo
techo. De este modo, pueden convivir padres, hijos y abuelos, o padres, hijos y
tíos, etcétera.
También es un ejemplo de familia extensa la situación en que uno de los
hijos tiene su propio hijo y conviven juntos, o cuando sobrinos se mudan con sus
tíos y primos.
Este tipo de familia está tradicionalmente más extendido en países con
menos recursos económicos. También es frecuente en países donde culturalmente
se valora la unidad del grupo familiar, como es el ejemplo de Japón, donde es
frecuente ver que los padres del padre de familia conviven bajo el mismo techo
que la familia nuclear de su hijo.
TODAS DIFERENTES, TODAS SON FAMILIA
Es evidente que las familias han cambiado aunque, quizá, la aceptación
social no las ha acompañado al mismo ritmo. Son muchos los estudios que ponen
de relieve que estas familias se encuentran con el rechazo de la sociedad en
que viven, dado que la población tiende a quedarse estancada en sus valores y
creencias.
Los prejuicios y estereotipos generan malestar, tanto en quienes lo dan
como en quienes los reciben. Normalizar las nuevas formas de ser familia es
fundamental tanto para los adultos como para los niños.
¡¡¡FELIZ DÍA DE LAS FAMILIAS!!!